Ciudad de México, 29 Noviembre.- Todos sabemos que en algún momento dejamos de crecer para después comenzar a envejecer, la publicidad y los medios bombardean con la idea de que ser joven es lo más hermoso, pero tranquilos que al comenzar a ser adulto tienes mayor inteligencia emocional, experiencias y mayor sustento económico.
Ahora si comenzamos con el debate: la Academia Nacional de Ciencias de Nueva Zelanda indicó que si tienes 26 años ya has comenzado a envejecer porque el proceso de envejecimiento sustituye al de generación, por otra parte, Jaime Miquel, catedrático de Fisiología Humana y exdirector del Laboratorio de Envejecimiento de la NASA, Francisco Mora, sostiene que el envejecimiento comienza pocos años después de los 30.
La diferencia de años puede variar debido a las diferencias entre la edad cronológica y la biológica, esta última diferencia en que tan bien o mal funcionan nuestros órganos por los hábitos alimenticios y el ejercicio que practiquemos durante nuestra vida adulta.
¿Cómo sé si estoy envejeciendo?
- Aumento de peso y dificultad para perderlo, pues la velocidad del metabolismo disminuye.
- Modificación de los patrones del sueño.
- Dificultad para recordar cosas.
- Cambio de niveles hormonales.
- La estructura ósea comienza a envejecer.
¿Porque envejecemos?
El doctor Pablo Argibay, director del Instituto de Ciencias Básicas y Medicina Experimental del Hospital Italiano, dijo que en realidad, comenzamos a envejecer desde que nacemos; todo dentro nuestro es un constante flujo de muerte-regeneración-muerte-regeneración. Sin embargo, con el tiempo los telómeros del ADN se van acortando, lo que afecta de manera directa a la continuidad de generación de la células.
En otras palabras el cuero deja de crear antioxidantes naturales y la regeneración cada vez es menor, deja de funcionar como años atrás.
Siendo un proceso natural del cuerpo que no podemos evitar, debemos aceptarnos y amarnos de acuerdo a nuestra edad y proceso de envejeciemiento, sin embargo es importante comer bien y ejercitarse, primero para estar saludables y segundo para sentirte bien por dentro y fuera.