Es probable que ya estés enterado de la situación que afrontan las abejas, uno de los polinizadores más importantes del mundo, y es que si no, debes saber que están muriendo a un ritmo alarmante. Por ello, hoy te vamos a revelar las consecuencias de la leche de almendras con estos insectos.
Parece ser que el responsable de un porcentaje descomunal de la desaparición de las abejas en los últimos años, es la creciente obsesión de los consumidores en EU de la leche de almendras.
De acuerdo con un informe reciente de The Guardian , la industria de almendras valuada en $ 11 mil millones (en California) depende de casi dos tercios de todas las abejas melíferas comerciales en los E, que son utilizadas para fertilizar las plantas que conforman los enormes almendros del Valle Central del estado.
Para polinizar estos árboles, las almendras a menudo se rocían con pesticidas como el glifosato (el compuesto químico activo considerado como carabinero) y la escala industrial de su producción significa que las áreas de cultivo abandonan todos los otros cultivos que disfrutan las abejas.
Otros factores también alteran la población de abejas y los exponen a un mayor riesgo. Tal es el caso de la intensa concentración de las abejas del país en un lugar también las hace demasiado susceptibles a la propagación de enfermedades o infestaciones de ácaros.
Para reducir los millones de muertes de abejas, los apicultores y productores de almendras necesitarán llegar a un proceso de producción más sostenible que rompa con la producción actual de cultivos monoculturales al estilo de fábrica.
Simultáneamente, reducir el uso de pesticidas salvaría a muchas abejas, y The Guardian señaló que un productor de almendras ha sacrificado alrededor de 10,000 libras de rendimiento anual para mantener su granja de 20 acres libre de pesticidas.
Por supuesto, un movimiento generalizado de consumidores lejos de las almendras y la leche de almendras evitaría que algunas de las abejas responsables de mantener los sistemas ecológicos del planeta funcionen sin problemas, pero es difícil esperar que tal cambio ocurra de la noche a la mañana.