Ciudad de México, 04 Abril.- En estos tiempos han surgido numerosos trabajos de reciclaje únicos y originales que nos han dejado ver como darle un segundo uso a muchos artefactos puede beneficiar considerablemente el medio ambiente.
Uno de los más recientes casos fue de un grupo de alumnos y profesores de la Universidad Politécnica de Amozoc (Upam) en Puebla luego de realizar un proyecto que convierte el PET en adoquines o losetas.
Gran parte de su incentivo fue luego de la información que arrojó la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, quien señaló que en México consumimos alrededor de nueve mil millones de envases y embalajes de PET que muchas veces terminan invadiendo y contaminando la vía pública.
Al momento están utilizando las botellas que se producen en la universidad y han descubierto que los adoquines tienen una vida útil de alrededor de 20 años, aún siendo sometidos a condiciones de intemperie y esfuerzos mecánicos, sin embargo si se combina el PET puro con otros aditivos se cree que su uso podría aumentar de forma considerable.
Con este proyecto se pretende evitar que por lo menos 900 millones de botellas de PET lleguen a los bosques, playas y ríos, además tiene ventajas como la larga duración ya que este material no se desintegra fácilmente por el medio ambiente.
Los moldes para los adoquines fueron diseñados con una estructura específica en forma de hexágono, con soportes transversales para reforzarlo y así evitar su rompimiento al ser empleado como piso de tránsito ligero.
Su primer uso será en los pasillos y las banquetas del campus universitario y según informaron este material representa un ahorro considerable ya que con al menos tres botellas de PET de dos litros se puede obtener una pieza hexagonal de cinco centímetros de apotema.