La celebración del Día de Muertos es para nosotros los mexicanos una de las fechas más significativas para conmemorar y es por ello que para celebrar el motivo se llevan a cabo distintas tradiciones, y entre ellas se encuentra parte de la literatura, que se expresa a través de las calaveritas literarias.
Se trata de un conjunto de rimas que tal como si se estuviera escribiendo un poema, se debe estructurar por versos y estrofas, sólo que aquí el tema principal es la sátira o la burla.
Estas calaveritas han sido escritas desde hace muchos años atrás, al menos se sabe que comenzaron a utilizarse por allá del siglo XIX.
Pero como toda literatura su estilo no era del todo aceptado por la sociedad y menos por muchos intelectuales por lo que hubo un momento en la historia en el que estas calaveritas estuvieron prohibidas.
Sin embargo, pasaron los años y este tipo de literatura fue aceptada y cada vez comenzaban a escribirse y publicarse más textos satíricos o irónicos, con tono bastante burlón y entre ellos las famosas calaveritas literarias.
Aunque en sí no existen reglas para redactar una si es importante la creatividad, el humor y la rima, y entre esos elementos buscar la mezcla entre los temas de la vida y la muerte.
Y es que en estas calaveritas el personaje principal siempre será la muerte aunque a veces se le llame de diferente manera como catrina, calaca, flaca o huesuda.
Entre mexicanos es muy común hablar siempre con un tono burlón y es por eso también que redactar calaveritas literarias es incluso divertido desde que se escriben hasta cuando las leen.
La mayoría de las veces, estos versos siempre van acompañados de adornos, dibujos o ilustraciones alusivas a la fecha, como esqueletos, calaveras o cruces…
Además de recordar la importancia del ciclo de la vida estas calaveritas acompañan nuestra tradición del Día de Muertos con una esencia que nos hace mirar distinto a la muerte.