Precisamente hoy es el día en el que México pone por encima de todo el rol de mamá, en cualquier hogar las madres son hoy lo más importante para los hijos, hijas y hasta los esposos también ponen su granito de arena para que esta fecha se convierta en un día especial para ellas.
Por ser hoy un día tan especial para aquellas mujeres que han dado a luz a uno o a varios seres, y que sin dudarlo llenan de amor a esas pequeñas o pequeños y que, aún cuando crecen y se alejan el amor que siente una madre por sus hijos(as) sigue intacto, haremos una reflexión sobre cómo la maternidad, como concepto y como rol dentro de la sociedad ha ido evolucionando con el paso de los años.
Es real que las mujeres que han sido madres ya desde hace varios años se sienten hasta cierto punto confundidas o probablemente en desacuerdo con la manera en la que en la actualidad las mujeres desempeñan su rol de madre, tanto que se les llama “mamás modernas”.
Han sido muchos factores los que han influido durante la historia para que, en primera, las mujeres decidan tener hijos, porque eso no es ni obligación ni deber de una mujer por el simple hecho de que por naturaleza su cuerpo esté listo en cierto momento para hacerlo, y, en segundo lugar, el cómo ejerce cada mujer su papel de mamá sin ser juzgada o rechazada dentro de la sociedad.
Aproximadamente hace 20 años, justamente por el año 2000, las mamás del siglo XXI, venían dejando atrás a aquella madre idealizada, que tenían tareas exclusivas con los hijos y con el marido por el hecho de haberse convertido en madre, quien tuvo a sus hijos a principios de ese año, recordará que la sociedad atravesaba una nueva etapa.
Las mamás al fin comenzaban a probar un poco de la libertad de la que los padres por ejemplo han gozado desde siempre, se les empezó a demostrar que la educación y la crianza no era una responsabilidad exclusiva de las madres.
Porque debido a ello muchas mujeres cargan a diario con una gran cantidad de obligaciones y responsabilidades que son realmente imposibles de cubrir por sí solas lo que se convierte en culpa y provoca en estas mujeres fuertes depresiones o problemas emocionales o hasta mentales.
Por suerte o tal vez por justicia, las mamás de hace un par de años y las de hoy en día tienen bastante conocimiento sobre la libertad de decidir si quieren o no ser madres, si quieren trabajar aún teniendo hijos, incluso de separarse del padre de sus hijos(as) si es necesario y ni la propia familia y tampoco la sociedad en general tienen derecho a juzgar o cuestionar estas decisiones.
Aunque no todo podría ser perfecto, este concepto de maternidad que se ha ido modificando, tienen también en la actualidad ciertos puntos delicados, la misma libertad de crianza, por ejemplo, pues, aunque no se trata de volver a una maternidad exclusiva, sí es necesario que la atención y el amor hacia los hijos(as) se de por ambas partes en las mismas cantidades.
Sobre todo se trata de tomar decisiones realmente maduras, pensando en todas las posibilidades que una mujer tiene para participar dentro de las estructuras sociales y más allá de traer una vida al mundo, pensar en que esa decisión debe aportar a tu vida lo que siempre has soñado.
Y antes de terminar, sí eres mamá y estás leyendo este texto, en verdad felicidades por todas esas acciones que sin pensarlo le han dado a tu hijo o hija la felicidad y la fortaleza con la que viven hoy en día, sigue siendo tú, como mamá y también como mujer.