Pensar en pasar los días sin subir una instastory, recibir notificaciones por tu nueva foto de perfil o ser etiquetado(a) en un sinfín de memes que aparecen en tu timeline te parecerá imposible, pero por tan sólo imaginarlo tu ansiedad ya comienza a manifestarse.
En tiempos de cuarentena, niños, niñas, jóvenes y adultos, agradecen tener en sus manos un smartphone o una Tablet, que ponen a cargar dos o tres veces al día por sus incontrolables deseos de mirar la pantalla y deslizar el dedo por horas, la delgada línea entre el ocio y el aburrimiento parece desaparecer cuando la ansiedad le gana al entretenimiento.
Permanecer en casa parece un gran reto para gran parte de la población, es difícil de admitir, pero el refugio de la mayoría se encuentra en un aparato electrónico y no precisamente en la interacción cara a cara, las personas que viven solas, seguramente se justifican porque es el único medio que los mantiene en contacto con familiares o amigos y seguramente quienes viven con más de una persona dirán que lo utilizan para distraerse de estar todo el día en el mismo lugar con las mismas personas.
No es novedad que, sin importar la edad, las personas permanecemos en línea las 24 horas del día, entre una revisada a Facebook, Instagram, Twitter, Tik Tok, y las conversaciones de Whatsapp, el día pasa y tú no has podido soltar el teléfono por más de un par de horas, ¿será aterrador pensar que estamos esclavizados con la tecnología?
Debido a las medidas tomadas a causa del COVID-19 como el aislamiento social, es decir quedarte en casa y salir estrictamente si lo necesitas; las personas hacen hoy lo que en muchas ocasiones han anhelado, pasar tiempo con las personas que más aman o dedicarse un tiempo para sí mismos, pero si es esto algo que has pedido siempre, ¿por qué en lugar de conversar frente a frente, prefieres seguir mandando stickers en los chats?
Sin embargo, a pesar del verdadero aislamiento social que provoca el uso de la tecnología en exceso y no precisamente provocado por una pandemia, es cierto, que también la tecnología juega un papel importante en estos tiempos difíciles y sobre todo para mantener algunos empleos o crear nuevos.
De no ser por Facebook, Instagram y el mismo Google, la mayoría de los negocios estarían en el olvido en tiempos de cuarentena, si no existieran estas plataformas, seguramente te sería difícil enterarte que las tienda o lugares en los que consumes constantemente siguen ofreciendo servicios y hasta a domicilio, este es al menos uno de los “favores” que nos hacen hoy en días las redes sociales.
Pero también es notorio que la desinformación incrementa gracias a la inmediatez de las redes sociales, el pánico o caos que probablemente te ha tocado vivir o te han platicado tiene una razón de ser y es que, al permanecer día, tarde y noche revisando Facebook, Instagram o Twitter, estás expuesto(a) a recibir y propagar información falsa.
Si bien, la tecnología se ha convertido en una gran herramienta para uso personal, laboral o social, se confirma aquello que dice que “todo en exceso es malo”, el problema no es tener cuentas en todas las redes sociales existentes, sino abusar de ellas, aislarte y perder tu tiempo pueden ser una de las grandes consecuencias que deja la conexión 24/7 con tus redes. Así como tienes tus tiempos para trabajar, comer y dormir, también los hay para realizar todas esas actividades que te motivan, apasionan o te mantienen entretenido(a), entre ellas revisar tus notificaciones, prueba destinar tan sólo unas horas del día para ello y busca más opciones para aprovechar tu tiempo.