El 11 de octubre es el Día Internacional de la Niña un día conmemorativo que no podemos pasar de lado: las niñas son miembros muy importantes de la sociedad y un grupo sumamente vulnerable.
Segun Unicef, aproximadamente mil cien millones de niñas forman parte de una generación que será crucial para definir el futuro del mundo. Por lo tanto su progreso es también el progreso de la sociedad, la economía, la familia y el de todos nosotros.
Pero un gran número de ellas vive situaciones de desventaja por su género. ¿Increíble que siga pasando? Sí, pero es más frecuente de lo que imaginamos.
Por ejemplo: ” Solo dos tercios de los países en desarrollo han logrado la equidad de género en la educación primaria, muchas niñas sufren aún prácticas horribles como la ablación, otras son obligadas a casarse muy jóvenes o con alguien que no han escogido, o se ven discriminadas en favor de un hijo varón.” se lee en un artículo de Unicef.
Cifras alarmantes
“Cada año se casan 12 millones de niñas menores de 18 años, 130 millones de niñas siguen fuera de las escuelas en todo el mundo y aproximadamente 15 millones de adolescentes de 15 a 19 años se han visto obligadas a mantener relaciones sexuales. ” señala una publicación de UN Woman.
Para recordar que tenemos un largo camino por recorrer para garantizar los derechos de las niñas, se instauró un día especial para no olvidar la causa, entre muchas otras acciones.
¿Cómo surgió el Día Internacional de la Niña?
“En 1995, antes de que las niñas actuales hubieran nacido siquiera, la Cuarta Conferencia Mundial sobre la Mujer hizo historia en el terreno de la defensa de los derechos de las mujeres con la adopción de la Declaración y Plataforma de Acción de Beijing. Se trata, sin duda, de la hoja de ruta más visionaria jamás aprobada para el empoderamiento de las mujeres y las niñas. ”
A partir del desarrollo de este documento se han tomado acciones para acabar con las desventajas que viven las mujeres y niñas en el mundo, entre ellas la celebración de este día.
Si tenemos niñas cerca contribuyamos a su desarrollo y, sobre todo, a que sepan que son libres, poderosas y capaces de lograr lo que se propongan.