Científicos de la Universidad de Australia Meridional han publicado su investigación sobre la arena de sílice sintética y su efecto contra la obesidad.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), en el mundo son millones de personas que padecen obesidad y las cifras siguen en aumento.
Paul Joyce y su equipo de científicos australianos, han descubierto que deriva de la sílice sintética tiene la capacidad para impedir la absorción de grasas y carbohidratos.
Esta investigación, ha sido probada tanto en animales como en humanos y no ha provocado hasta ahora efectos secundarios desagradables para el estómago de los pacientes.
Ya que según los expertos, este es un factor considerable para que los pacientes decidan iniciar o no un tratamiento contra la obesidad.
Por ello, en colaboración con el Centro de Investigación Irlandés Glantreo Limited, trabajan en el nuevo tratamiento que podría beneficiar a millones de personas.