El proyecto comenzó siendo una actividad escolar, sin embargo, Alejandro Carrera ha percibido una gran oportunidad en dicho proyecto.
Alejandro Carrera estudia el séptimo semestre de su carrera y eligió el Pueblo Mágico Huasca, en Hidalgo, para realizar su práctica escolar.
Eligió colaborar en la Casa de la Cultura por lo que comenzó revisando la historia del lugar, sus antecedentes y cada espacio en su interior.
Así Carrera comenzó con un diseño de arco de medio punto, de ahí partió y decidió proponer un edificio de tres niveles.
Donde no sólo los turistas puedan visitarlo, sino también personas nativas, e incluso crear una escuela.
Además Alejandro consideró también crear un espacio inclusivo, apto para personas de todas las edades y para personas con diversas discapacidades.
Por lo que en el primer piso se instalará la biblioteca, la zona de servicios y los baños, en el segundo piso se impartirán clases de música y danza y en el último nivel encontrarán cafetería y terraza.
De esta manera Alejandro se motiva para continuar no sólo con su carrera universitaria sino también con este proyecto comunitario y otros más que puedan llegar.
